viernes, 22 de mayo de 2009

La vida con Ernesto: Cuerda confusiónLa vida

- Encontré un baul de los recuerdos. Un baúl blanco grande con una puerta transparente, cualquiera diría que era un agujero sin fin, pero no. Era un baúl parecido a una caja fuerte, porque había que marcar una combinación correcta para poder abrirlo. Si te equivocabas la caja se llenaba de una especie de espuma q iba destruyendo todo recuerdo guardado. Lo sé porque me equivoqué, creí que era mas sencillo, pero ningún ruido me ayudó a descifrar la clave.


- ¿Pero usted en que planeta vive?


- No comprendo ¿acaso no me está viendo vivito y coleando? ¿Cómo que en qué planeta vivo? En este m’ijo, en cual otro va a ser...


- Es extraño, muy extraño…


- ¿Ha visto? Yo pensé lo mismo. En la calle también. las madres ya no cuidan a sus hijos, ya no los sacan a pasear o a jugar a la plaza. Ahora lo hacen las hermanas mayores. Pero ¡Qué cantidad de años de diferencia!


- Esas son las madres de los niños Don Ernesto.


- Es extraño, muy extraño.


- Así son las cosas hoy. La ropa ya no la lavan las señoras, de eso se ocupan esos baúles que usted vió. Y las madres tendrían que estar jugando un una plaza en vez de llevar a sus hijos.


- Pero m'ijo usted es, como dicen ahora, un prejuicioso.


- Y usted es, como decían en sus tiempos, un loco de mierda.


2 comentarios:

  1. Que buen diaaaaaaalogo, me encanta este blog, es tan genial :D

    Saludos!!

    ResponderEliminar
  2. qué par de pájaros los dos!!!
    jajaja está re bueno, super surrealista el diálogo
    me acordé del dialógo entre mi mamá y el verdulero... cuando me compró a mi.. que había nacido de un repollo jajaja
    un besooooo

    ResponderEliminar

lunares